Aikido es una forma de educación física, mental y espiritual. El nombre, Aikido, se traduce como la forma (hacer) de combinar o armonizar con (ai) el espíritu o la naturaleza (ki). Por lo tanto, el nombre apunta hacia el principio subyacente del arte, que es mezclarse con cualquier ataque, mientras se conserva el propio equilibrio y, por lo tanto, se encuentra la armonía incluso dentro del conflicto. En Aikido, uno se basa en el estudio de técnicas como lanzamientos, bloqueos de articulaciones o golpes nerviosos para afrontar cualquier ataque con un mínimo de esfuerzo. La mente del practicante debe ser flexible, tranquila y concentrada y las técnicas deben fluir por un sentido de sincronización, gracia y equilibrio. Esta capacidad de armonizar con el oponente, a través de un duro entrenamiento, conducirá a una mayor sensación de armonía dentro de uno mismo y del entorno y del mundo.